Solo una clara inyección de confianza por parte de Europa, para traer de nuevo a los grandes inversores que han huido despavoridos, será lo indicado para relajar la incertidumbre, las primas de riesgo e incluso para intentar salir de este proceso recesivo que parece que nunca termina.
Esta semana ha sido patético ver como la emisión de deuda Alemana quedaba sin cubrirse, un 40% sin colocar, sólo porque el tipo de interés estaba demasiado bajo, no porque era un riesgo invertir en deuda alemana, sino porque era poco rentable comparado con lo que ofrecen las deudas de otros países de la zona euro. Esto en mi lenguaje se llama ESPECULAR de forma clara y contundente. Y esto es uno de los problemas que tiene la eurozona, aparte de otros muchos, la vorágine especuladora y la debilidad de algunos países han colocado a los especuladores a frotarse las manos con los rendimientos que obtienen de sus inversiones.
Y las BOLSAS que? pues nada, a seguir intentando anticiparse al mercado y dar por hecho mucho de lo que aún no está ni siquiera previsto. Eso es el riesgo y el pánico, que es el gap donde se mueven los mercados bursátiles.
Ya las bolsas están descontando con su miedítis la recesión de Europa (que todavía no es un hecho) , el desplome de la economía global (Que no es cierto), la desaceleración de china (Que se provoca para contener la inflación) etc etc... siempre las bolsas se están intentando anticipar a lo que va hacer el mercado, pero de forma dramática y visceral, porqué? porque muchos de los que están ahí metidos, los fondos, los brokers, son personas con sentimientos, miedos y alegrías, y actúan, muchos de ellos, guiados por percepciones personales, aunque intenten manifestar lo contrario, en muchos casos dichas percepciones no están contrastadas.
Las noticias sobre catástrofes gubernamentales y bancarias están pululando por todo el éter mediático mundial, desde que hay GRANDES bancos europeos que están en quiebra, hasta que hay países que se caen por si solos, pasando por la ruptura inmediata del euro. A esto no se que decir, desde luego no tengo datos internos de las cuentas de los grandes bancos, ni creo que nadie los tenga de verdad, más bien creo que es rumorología de venta para la prensa (siempre hay algo que poner). Si recuerdan cuando la quiebra de Lehman nadie se enteró hasta el día del propio desplome, tanto fue así que un día antes lo tenían clasificado de doble AA por la agencias de rating. Por lo tanto dejémonos de especular tanto con el desastre (Los clásicos agoreros no van a dejar de hacerlo, véase artículo "agoreros del desastre"). y preocupémonos de aportar lo que esté al alcance de cada uno para solucionar este entuerto que nos hemos buscado todos.
Y Alemania, como gran maná que nos puede proporcionar alegrías, que? pues a lo suyo, entiende que las cartas del juego europeo no son las iniciales y no quiere jugar a que uno lo ponga todo y los otros lo gasten. (Tendrá su razón la Merkel). Ahora bien, no se olvide que Alemania es lo que es gracias a Europa y que su mercado cautivo lo tiene en Europa y que debe de cuidar a Europa para continuar en la senda del crecimiento. Alemania sin Europa no es "nadie", por lo tanto que arriesgue ahora en momentos difíciles y que haga todo lo posible para ayudar a salir de ésta, porque sin lugar a dudas será uno de los más beneficiados de esta crisis sistemática. Desde luego con ambiguedades, decisiones aplazadas, piedras en el camino, soluciones a medias tintas, no se consigue nada. Que se pongan todas las cartas encima de la mesa y que cada uno se comprometa a hacer lo que tiene que hacer, so pena de salir de la moneda única (que era quizás lo que había que haberse hecho con Grecia desde el primer momento que se descubrió el engaño y devolverla al dracma de donde nunca debió salir).
Ya vuelve el economista con su sensacionalismo exarcebado a incluir titulares como: "La caída del euro se puede producir en breves semanas". Estos señores que son los mentores de los agoreros mayores del reino como El "profesor" Becerra y el financiero Británico-iraní venido a menos (Que no tiene si quiera estudios de ningún tipo), considero que han dejado al un lado el rigor de las noticias por la venta masiva de su publicación, viendo como la economía que está en boca de todos, se puede convertir en "prensa basura" y sensacionalista con titulares y artículos de esta índole. Desde luego, hace mucho, pero mucho, que no leo en el economísta artículos de gente de prestigio que no sean del interés del editorial, cuyo fin, parece ser de forma exclusiva, venderse a costa de lo que sea. Que pena la falta de prestigio que está teniendo esta publicación.
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