Su agazapada figura detrás de la madera, su dulce mirada y su mejor complacencia, hacían una masiva influencia e interminable cola dirigida hacia las puertas marchitas de su kiosko.
Descanse en paz buena mujer y mejor persona que pasó sin pena ni gloria por esta lujuriosa vida, endulzando el paladar de millones de niños con su magnífica sonrisa.
Noviembre 2009.